La hormiga anda muy ajetreada en estos días, pero algún hueco debe sacar para hablarnos de las elecciones de Madrid, en martes, y sobre el estado de la pandemia. De el primero, un puñado de balas y sobre el segundo FITUR en el horizonte.
Son múltiples las encuestas que disponen para los madrileños y su cámara autonómica con un total de 136 representantes, 4 más que en la anterior legislatura, y destaco como analista de datos el estudio que publica El País. Pero aplicando el desarrollo crispado en la campaña, motivado principalmente por la entrada en arena de Pablo Iglesias, y los «juegos de balas» por envío postal, creo que algo es seguro, se borrará del mapa al partido político que originó la nueva cita electoral y que era consorte actualmente del poder. Sí, ciertamente me refiero a la certeza de la desaparición de Ciudadanos, pues su espacio de centro ha perdido todo el sentido en la actualidad y no alcanzará ni tan siquiera el 5% mínimo para optar a representantes. En esta cuestión de certeza, también es clave el desarrollo de una jornada laboral de elecciones que aúpa a la Presidenta Ayuso a la primera posición, e incluso, y esta es ya una apreciación personal, rozaría la mayoría absoluta (69 diputados), por ser la protagonista sobre la que recae el mayor nivel de crispación, unido al nivel del rival que se ha mostrado claramente superado por los acontecimientos, me refiero sin duda a Gabilondo. El avance de Más Madrid supondrá un reparto de escaños mayor entre las fuerzas de izquierdas y podría llevar al PP a alcanzar, por sí mismos, la mayoría, siendo factible, en cualquier caso, con el apoyo de VOX. Del ex-vicepresidente nada que decir, salvo que tendrá que buscar nuevos y conocidos quehaceres en la oposición pero en política nacional, pues poco provecho saca de su visita a la Asamblea madrileña, salvo la mejora de resultados para su antiguo amigo Errejón.
Por otra parte, o como escenario de fondo, contamos con la situación de nuevo control de la pandemia a través de la vacuna, que no ha llevado a las cifras de presión sanitaria esperadas por el Ministerio. Abril cierra con un 30% de la población etaria (mayores de 16 años) vacunada con la primera dosis y cerca del 12% con pauta completa, la positividad a la baja, y los síntomas menos severos, pero con enfermos en UCI de mayor duración, al ser estos de menor edad y con más probabilidad de vencer al coronavirus. Ahora mayo debe ser el trampolín para la lucha contra la crisis pos-pandemia, la económica, en la que España ha de mostrar su escaparate turístico en FITUR, el próximo 19 de mayo como un país para visitar con seguridad, y ganar la baza a competidores como Francia, Grecia o Italia, pues es crucial para la salida en ‘V’ tan anunciada. El programa de vacunación a ritmo de 4 millones semana, la estabilidad en los hospitales, el carnet de vacunación europeo y el fin del estado de alarma el próximo día 9 son las armas de control para transformar la pandemia en una patología más a tratar, como lo fuera la gripe.
Pues es hora de decisiones que anticipen un escenario de recuperación, no dudemos, ya que la duda que puede ser ahora de semanas, nos puede conducir a resultados en diferencias de años sobre los que se anticiparon, en las crisis el tiempo de reacción es el gran enemigo.